Hay algo que me gustaría quedara claro.
Vi esta imagen en internet y no pude resistirme a colarla en el blog. Porque es así. Porque lo veo todos los días en la consulta y porque lo veo a todas horas fuera de ella.
No envejecemos porque cumplamos años, se nos arrugue la piel, el cuerpo sufra cambios o nuestro aspecto varíe. Tan sólo envejecemos cuando vaciamos nuestra vida de sueños y nos quedamos sin esperanzas.
Por ello, hay que desterrar el sentimiento de envejecer al llegar la menopausia. Hay que tomarla como una etapa más de la vida de la mujer (al igual que está la niñez y la etapa fértil), en la que suceden cambios como en cualquier otra etapa, pero también a la que pertenecen sueños y esperanzas específicas de este período, del mismo modo lo hacían los sueños y esperanzas propios de las etapas anteriores.
Y tomándola como una etapa más, vamos a afrontarla de la mejor forma posible, para que los cambios que en ella acontecen no nos supongan un problema que nos pudieran "arrugar nuestros sueños", a través de las siguientes claves:
1. Reconocer la menopausia como período alcanzado por la mujer al final de la etapa reproductiva, generalmente de forma gradual, que suele aparecer en torno a los 50 años.
Podemos dividirla a su vez en dos etapas:
- Perimenopausia: Tiempo en el que aparecen irregularidades en los ciclos menstruales.
- Postmenopausia: Queda establecido tras 12 meses sin regla.
Cuando este proceso se da en mujeres menores de 40 años, se llama menopausia precoz.
Hay una forma de menopausia abrupta. Se da en mujeres en las que, por diversos motivos, son intervenidas quirúrgicamente y se les quita útero y ovarios, presentando desde ese mismo momento la menopausia.
2. Conocer los SÍNTOMAS de la menopausia:
- Síntomas vasomotores (Por alteración de la dilatación y contracción de los vasos sanguíneos): Sofocos y dolores de cabeza.
- Síntomas genitourinarios: Vaginales (Sequedad, picor, dolor en las relaciones sexuales o sangrado postcoital), Incontinencia urinaria,
- Alteraciones cardiovasculares: Aumento de la presión arterial (produciendo Hipertensión arterial), aumento del colesterol, lo que puede verse relacionado con aumento de riesgo de eventos cardiovasculares como Infarto de miocardio o Ictus.
- Alteraciones en la densidad del hueso, pudiendo aparecer osteoporosis y secundariamente fracturas.
3. Tener claro que el DIAGNÓSTICO es clínico. No es necesario realizar analíticas, estudios ginecológicos ni densitometrías para diagnosticar la menopausia.
Tan sólo en aquellos casos especiales, como por ejemplo la menopausia precoz, se podrá valorar la indicación de realizar alguno de ellos.
4. Conocer los TRATAMIENTOS de la menopausia con los beneficios y riesgos que asocian:
- Terapia Hormonal Sustitutiva sistémica: Durante menos de 2 años y sólo para casos de sintomatología muy acusada que interfiera en la vida de la mujer. Bajo prescripción médica y actulamnete en discusión por sus elevados riesgos (relacionado con la aparición de cáncer de mama).
- Terapia hormonal localizada: En forma de crema/supositorios/óvulos por vía vaginal para el tratamiento de los síntomas vaginales. Durante un período limitado y siempre bajo supervisión médica.
- Terapia no hormonal: Isoflavonas (aunque no han demostrado eficacia), antidepresivos (para aquellas mujeres con importante repercusión negativa psicologicamente).
- Terapia no farmacológica: Terapias cognitivas para ayudar a aceptar de forma más saludable esta fase de la vida, así como ejercicios de fortalecimiento de la musculatura pélvica para prevenir la incontinencia urinaria.
5. Implicarse en el autocuidado e implicar a la familia.
Como hemos dicho, cada etapa de la vida, conlleva unos cambios y estos cambios repercuten en toda la familia. Por ello es importante que todos en el entorno familiar tomen conciencia de ello y sepan aceptar, cuidar y respetar a la mujer en la menopausia.
Además, atendiendo a las alteraciones cardiovasculares que se suceden, hay que prestar más atención en el estilo de vida y corregir todas aquellas cosas que no estábamos haciendo bien, incidiendo en realizar una
Dieta saludable y Ejercicio diario.
Y no olvidar de las revisiones rutinarias preventivas, que en esta etapa se componen de mamografías cada dos años a partir de los 50 años, y las citologías cada 3 años como se venían realizando.
Nunca dejéis de soñar ;)
BIBLIOGRAFÍA: Guía NICE. Menopause:diagnosis and management. Nov 2015.